Impresiones de un traidor: No more mutants… please

Impresiones de un traidor: No more mutants… please

El tres de marzo se estrena Logan, canto de cisne de Hugh Jackman como Lobezno que sirve tanto para despedirse del personaje como para cerrar la saga que empezó en el año 2000. Que ya iba tocando.

Hay demasiadas películas de mutantes y la cosa empezaba a ser cansina. Sí, tenemos X2 y Deadpool, y ahora Logan, pero también X-Men: La decisión final o X-Men Orígenes: Lobezno, filmes que están entre la línea de lo malo, lo irregular y lo directamente olvidable. No solo estos, en general aunque la franquicia X de Fox ha dado buenos momentos, no hay ninguna que se salve del todo de la quema.

Y para que conste en acta, antes de que empecéis a lanzar
improperios, he disfrutado con (casi) todas ellas. Pero esto empieza a pasarse. No es que la saga haya crecido y ampliado todo el universo mutante hasta hacerlo incomprensible, lo que llegó a pasar en el cómic, es que ha sido más bien todo lo contrario con un afincamiento total en lo que los veteranos conocemos por Patrulla X y los que tienen menos canas por X-Men.

Cuando todo empezó nos sorprendimos con una película que ha envejecido bastante mal, y volvimos a hacerlo con su secuela. Después llegó una tercera parte que si bien es entretenida y contaba con Kelsey Grammer, era también muy irregular y no lograba llegar al nivel de las anteriores entregas.

La historia siguió, se reseteó el universo y se prefirió seguir explotando a ese pequeño grupo, a esos pocos hombres X (con algunas nuevas inclusiones) en vez de arriesgar algo para intentar salir de la zona de confort. Al final ha pasado lo único que podía pasar…

Agotamiento, cansancio, personajes que no dan más de sí, filmes que caminan por el terreno de lo obvio y lo conocido al punto de repetir tramas y esquemas (a X-Men: La decisión final y X-Men: Apocalipsis me remito) lo que ha logrado que un público receptivo y con ganas de más llegue a las salas con dudas, miedos y recelo.

El problema es que se ha explotado demasiado a la gallina de los huevos de oro, al punto de que ahora más que algo dorado lo que sale de ella es aluminio y no muy brillante.

Ahora, quizá, con Logan se cierre y se abra algo nuevo. Legión se ha estrenado en televisión levantando curiosidad y aplausos, mientras el proyecto de Los Nuevos Mutantes parece avanzar y el del Club Fuego Infernal pasa totalmente al ostracismo.

¿Hay futuro para el homo superior? Sí, por supuesto pero antes hay que cerrar unos días del presente/pasado que se están extendiendo mucho más de lo que deberían.

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